Rumiantes el portal de rumiNews

5 pasos para un mejor control de la criptosporidiosis

Cryptosporidium parvum es una de las principales causas de diarrea en terneros lactantes, tanto en infecciones puras como en combinación con otros agentes.

Eliminar la criptosporidiosis de la granja es una tarea compleja debido, entre otros factores, a:

La baja cantidad de ooquistes necesaria para causar infección en relación con los millones que excretan por las heces de los terneros infectados.

Su alta resistencia ambiental y a los desinfectantes.

Sin embargo, si se logra reducir la cantidad de ooquistes de C. parvum ingeridos por el ternero y retrasar la edad de infección, disminuirá:

El porcentaje de terneros con diarrea.

La gravedad de los síntomas.

La excreción de ooquistes.

(Zambriski et al., 2013)

Para lograr el control de la criptosporidiosis, se puede trabajar en un PLAN DE CINCO PASOS que permita identificar las áreas que requieren atención y establecer un plan de acción que ayude a reducir la presión de infección y maximizar la resistencia del ternero.

PASO 1. DIAGNÓSTICO  

Identificar el agente/s responsable de la diarrea y la participación del criptosporidio es crucial a la hora de implementar las estrategias de control más oportunas.

Para llegar a un adecuado diagnóstico es recomendable complementar dos tipos de diagnóstico

DIAGNÓSTICO ETIOLÓGICO

Se debe hacer un muestreo de heces de los animales afectados para su análisis:

A. El uso de kits de campo de diarrea, que, al ser de uso en la granja son sencillos, rápidos y permiten identificar la presencia de C. parvum, rotavirus, coronavirus y/o E. coli K99.

B. Envío al laboratorio para su análisis, lo que será clave cuando sospechemos la implicación de otros agentes, como Salmonella y coccidios, que no están incluidos en estos kits, o se requiera un antibiograma.

DIAGNÓSTICO EPIDEMIOLÓGICO

Puede haber animales que excreten enteropatógenos como C. parvum de forma asintomática (Diaz y col., 2021).

Por ello, a la hora de interpretar el resultado etiológico, se debe evaluar si el cuadro clínico y la información epidemiológica del caso son compatibles:

Edad inicio de la diarrea.

Características de la diarrea.

Porcentaje de terneros con diarrea, porcentaje de bajas, etc.

PASO 2. MEDIO AMBIENTE Y MANEJO 

Los criptosporidios son muy resistente a nivel ambiental, especialmente en condiciones adecuadas de humedad, siendo además resistente a muchos desinfectantes de uso habitual, por lo que entre las recomendaciones de desinfección se encuentran:

Métodos físicos: desecación, radiación solar, compostaje, flameado.

Métodos químicos: peróxido de hidrógeno, compuestos de amonio cuaternario o cal viva.

Fuentes de infección

A nivel ambiental, el ternero puede entrar en contacto con el parásito desde el nacimiento en la propia paridera, ya que las madres pueden eliminar el parásito alrededor del parto.

La principal fuente de ooquistes estará en los terneros con diarrea, por lo que es recomendable separar a los terneros enfermos y/o atenderlos en último lugar cuando se alojen de forma individual.

Los terneros de más edad aparentemente sanos también pueden excretar ooquistes que infecten a los más jóvenes. Por lo que se aconseja evitar el contacto entre terneros de diferentes edades.

Es recomendable dejar periodos de vacío sanitario de las instalaciones antes de introducir nuevos terneros.

Otro posible punto de contaminación son las fuentes de agua de la granja si no hay un tratamiento adecuado (aguas de pozo sin tratar, balsas de almacenamiento, escorrentía de estiércol o fallos en los tratamientos de desinfección).

Eliminar al Cryptosporidium del agua es todo un desafío debido a la alta resistencia de sus ooquistes a los desinfectantes convencionales como el cloro. Sin embargo, existen algunos métodos físicos más eficaces para eliminarlo:

Ebullición.

Filtración convencional o avanzada con tierras diatomeas o filtros de membrana (nanofiltración con poros de ≤1 micra).

Radiación UV.

Ozonización.

Otro punto a revisar son los protocolos de limpieza del material de alimentación:

Uso de solución alcalino-clorada y desinfección.

Dejar secar los materiales entre usos o, en caso de compartir cubos o biberones, alimentar siempre en orden creciente de edad.

PASO 3. VACUNACIÓN 

La vacunación frente a Rota-Corona-Coli ha desempeñado un papel crucial en la prevención de la diarrea neonatal.

Ahora contamos también con una innovadora vacuna Bovilis Cryptium®, que permite proteger a los terneros frente a la criptosporidiosis al inducir la producción de anticuerpos en el calostro y leche de transición de las madres vacunadas, que actuarán frente a la Gp40 presente en al menos 4 fases del parásito:

Dificultando la infección de las células intestinales y su replicación.

Minimizando la gravedad y duración del cuadro clínico.

(Timmermans et al., 2023)

Para que la vacuna pueda ejercer su papel protector hay 2 aspectos fundamentales a tener en cuenta:

1. La vacunación debe haberse completado al menos tres semanas antes del parto, ya que de lo contrario no dará tiempo a que las madres produzcan suficiente cantidad de anticuerpos.

2. La vacuna protege a través del calostro y la leche de transición, siendo clave alimentar a los terneros con leche de transición de las madres vacunadas durante los primeros cinco días para proporcionarles protección vía lactogénica.

Estudios sobre la eficacia vacunal frente a C. parvum 

En los estudios llevados a cabo recientemente en granjas de vacuno lechero y de carne de nuestro país se ha evidenciado lo siguiente:

En vacuno lechero – Mayor inmunidad y mejor rendimiento productivo (Carbonell y col., 2025)

El grupo vacunado presentó niveles significativamente más altos de anticuerpos específicos frente a la Gp40 de C. parvum (expresados en log₂) en comparación con el grupo control (p < 0,01), tanto en el suero preparto (16,7 ± 1,8 vs 11,1 ± 1,4), como en el calostro (18,1 ± 1,9 vs 12,9 ± 1,5) y en el suero de los terneros (17,4 ± 1,8 vs 11,2 ± 1,3).

Los terneros nacidos de madres vacunadas mostraron una menor mortalidad por diarrea (3,7 % vs 13,5 %) y una mayor ganancia media diaria a los 21 días (482,8 vs 400,2 g/día).

En vacuno de carne – Reducción de la morbilidad y del uso de antibióticos (Iglesias y col., 2025)

Tras la vacunación de un lote de vacas limusinas puras con el objetivo de proteger la paridera de invierno, se observó:

Una drástica reducción de la morbilidad (solo un caso leve de diarrea, 5,5 %).

Ausencia de visitas de urgencia (para rehidratar terneros).

Una notable disminución en el uso de antibióticos terapéuticos (0 mg frente a una media anual de 8 kg de paromomicina).

Reducción significativa del tiempo dedicado al tratamiento de terneros enfermos, lo que se tradujo en una mayor tranquilidad para el personal de la explotación.

PASO 4. CALOSTRO Y LECHE DE TRANSICIÓN 

Todos conocemos la importancia del encalostrado para la salud de los terneros.

Quizá nos hemos focalizado tanto en el manejo del calostro durante las primeras 24h de vida, que nos hemos olvidado de la importancia de continuar administrando la leche de transición durante los primeros días de vida, tal y como se hacía de forma tradicional en las granjas.

Un ganadero nos dijo hace poco que era vintage porque había continuado usando leche de transición y resulta que ¡ahora se ha puesto de moda!

Numerosos estudios recientes han puesto de manifiesto que continuar alimentando con leche de transición aporta numerosos beneficios para la salud intestinal y el crecimiento de los terneros (Schalich et al., 2021), especialmente cuando las madres han sido vacunadas para proteger a los terneros frente a la diarrea.

En la práctica, para poder alimentar a las terneras durante varios días con esta leche de transición, nos enfrentamos con los retos de la recolección, almacenamiento y conservación que nos hace plantearnos ciertas preguntas.

¿Uso calostro diluido o leche de transición?

Dado que a menudo es difícil recolectar suficiente calostro de primer ordeño, la mayor parte de las granjas opta usar leche de transición de las vacas de 2º al 5º ordeño (Tejero y col, 2025).

A la hora de seleccionar durante cuántos ordeños recolectar la leche de transición, cuanto más próximo sea al primer ordeño, mayor calidad inmunológica tendrá.

Lo ideal, cuando sea posible, será utilizar la leche de transición de los primeros ordeños y evitar diluirla en lactoreemplazante.

¿Sería necesario/o recomendable hacer un tratamiento térmico en la LT como la pasteurización?

Cuando no se pueda garantizar una higiene impecable en el ordeño, en las cántaras de ordeño o en los sistemas de almacenamiento, y especialmente si en la granja hay presencia de patógenos que pueden transmitirse al ternero a través de la leche (como Paratuberculosis, Mycoplasma o Salmonella), se recomienda la pasteurización.

El tratamiento térmico recomendado, al igual que en el caso del calostro, consiste en calentar la leche a 60 °C durante 60 minutos.

¿Cómo conservo la leche de transición para evitar el riesgo de contaminación?

Para conservar la leche de transición entre el ordeño y su administración, se puede recurrir a la refrigeración, al igual que se hace habitualmente con el calostro o con la leche de vaca.

No obstante, es importante tener en cuenta que se necesitará una mayor capacidad de refrigeración, ya que el volumen a almacenar será más elevado.

Un punto crítico es la velocidad de enfriamiento, ya que, si la refrigeramos en bidones grandes y/o neveras de poca potencia, tardará muchas horas en bajar a 4 °C y las bacterias aprovecharán para replicarse.

Será fundamental invertir en un tanque, arcón o nevera y/o agregar conservantes químicos, como el sorbato potásico, para minimizar la multiplicación bacteriológica y alargar hasta 5 días el tiempo de conservación en refrigeración (Steward y col., 2005; Denholm y col., 2022; Carbonell y col., 2024).

¿Cómo identifico los biberones y terneras que están en el programa de los 5 días con leche de transición?

En las granjas se utilizan distintas estrategias para facilitar a los empleados la identificación de los terneros a alimentar con leche de transición, por ejemplo, marcajes en las casetas, pegatinas en las que se señala cada toma con una raya, o una cuerda de pita atada a la caseta a la que se le añade un nudo por cada toma administrada.

¿Debo alimentar solo a las hembras de recría con esta leche de vacas vacunadas o también a los terneros para venta o cebo?

Será clave para el éxito que todos los terneros sean alimentados con leche de transición de vacas vacunadas, con fin de lograr una protección de rebaño que minimice la presión de infección para ambos grupos de animales.

5. TRATAMIENTO 

A pesar de los cuatro pasos anteriores, en situaciones de alta presión de infección puede ser necesario tratar de forma individual a los terneros que presenten un cuadro clínico. Además, en muchas ocasiones, las infecciones son mixtas y pueden estar implicados varios agentes, lo que requiere tratamientos diferentes.

Lo prioritario ante cualquier tipo de diarrea es mantener a las terneras bien hidratadas.

En caso de que algún ternero enferme por criptosporidios en un entorno con alta carga ambiental, será necesario aplicar un tratamiento terapéutico con un criptosporidiostático, como la halofuginona (Halocur®).

La vacunación incrementa la resistencia, pero no evita la infección. Por tanto, al igual que se tratan con antibióticos a los terneros que desarrollan neumonía a pesar de estar vacunados, también se deben tratar aquellos casos clínicos de criptosporidiosis cuando la situación lo requiera.

El control de la criptosporidiosis requiere un enfoque integral que combine diagnóstico adecuado, buen manejo e higiene, uso estratégico de la vacunación, aprovechamiento de la leche de transición como herramienta inmunológica, y tratamientos individualizados cuando sea necesario.

Aplicar de forma coordinada estos cinco pasos no solo mejora la salud y el bienestar de los terneros, sino que también contribuye a reducir la presión de infección en la granja y a optimizar los resultados productivos.

Agradecimientos. Nos gustaría agradeceder a los veterinarios y ganaderos que han participado en los estudios, que han ideado soluciones para facilitar la alimentación con leche de transición y/o compartido su experiencia con la nueva vacuna Bovilis Cryptium®.

Leer más sobre MSD Animal Health

Salir de la versión móvil