Campo Vivo, marca líder de alimentos orgánicos en México, ha logrado poner en alto el nombre del campo a través de una práctica de comercio justo y una fiel relación con pequeños productores a lo largo de la república mexicana.
Desde 2019, Mateo Dornier, fundador de Campo Vivo, ha trabajado en alianza con la cooperativa PRADEL para desarrollar Prado Verde, una nueva línea de lácteos orgánicos que incluye cuatro presentaciones de leche y cinco especialidades de quesos.
La cooperativa PRADEL está ubicada en el municipio de Berriozábal en el estado de Chiapas. Fue fundada en el año 2000 con el objetivo de organizar la producción lechera en la zona y solucionar el tema de bajos precios; dándole un valor agregado al trabajo del campo con inversiones en infraestructuras, políticas de calidad y la producción de alimentos innovadores y adaptados a la demanda. Gracias al esfuerzo en conjunto de la cooperativa se han logrado unir más de 1000 productores, todos socios de la organización.
“Teniendo una filosofía y objetivos similares, el acercamiento entre las dos empresas se hizo de manera muy natural. Chiapas es uno de los estados con más dificultades económicas en México, pero también es uno de los mayores productores de leche en toda la república. Nosotros elegimos colaborar con una cooperativa chiapaneca por su gran cultura en producción de leche y quesos, promoviendo un sistema de comercio justo, así fue como nació Prado Verde», mencionó Mateo Dornier.
Prado Verde ha llegado a los anaqueles de los supermercados en las principales ciudades de México. Además de ser libre de antibióticos y hormonas de crecimiento, bajo el sello y la certificación de un producto 100% orgánico, también garantiza el libre pastoreo de las vacas de raza cebuina. Estas vacas viven en pleno bienestar en las praderas, y de esta manera, tienen el tiempo necesario para digerir. Toda la fauna del potrero produce una leche con una mayor concentración de sólidos y de sabor. Esto permite a la leche tener un color, olor y cuerpo más concentrado y sabroso, al mismo tiempo otorga un sabor incomparable en la línea de quesos, logrando la mejor calidad del mercado.
Más allá de la creación de una nueva marca, la alianza de Campo Vivo con PRADEL es un proyecto ambicioso y novedoso para México.
“Chiapas es un estado con mucha producción de leche y el trabajo que hicimos con la cooperativa durante 20 años es inmenso. En un mercado muy competitivo, donde las multinacionales tienen una guerra de precios, hemos logrado dar el poder a los productores, fomentar una distribución regional y promover una agricultura sustentable. El potencial de PRADEL para producir leche orgánica es inmenso, no tenemos cuatro granjas orgánicas en este proyecto, pero tenemos más de mil, y la capacidad de producir hasta diez mil litros de leche orgánica diaria. Poco a poco estaremos certificando más productores”, explica Rodrigo Zuart, director general de PRADEL.
Léa Saule, Brand Manager de Campo Vivo resaltó el uso de la tecnología Tetra Pak para el envasado de la nueva línea de lácteos; «los empaques están hechos a partir de cartón proveniente de fuentes certificadas, fomentando una gestión forestal sustentable. Para seguir con nuestro objetivo de cuidar al medio ambiente, elegimos omitir la tapa que existe en muchas presentaciones de leche, así evitamos el desecho de plástico duro, difícil de reciclar. Todos tenemos unas tijeras en casa, perfectas para abrir un empaque de leche orgánica” mencionó ella.
Desde Chiapas, la línea de lácteos orgánicos Prado Verde, está lista para estar presente en las mesas de las familias mexicanas. Mateo Dornier y Rodrigo Zuart siguen trabajando en conjunto en la creación de nuevos productos para crecer la familia Prado Verde, entre los cuales se encuentran mantequilla, crema y yogurt, todos totalmente orgánicos y fieles a las técnicas tradicionales chiapanecas.