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El Gobierno regional informa a ganaderos y cazadores de la detección en tres ciervos de la enfermedad hemorrágica epizoótica

El Gobierno regional ha informado al sector ganadero y a la Federación de Caza de la detección en tres ciervos de síntomas compatibles con la enfermedad hemorrágica epizoótica (EHE)

Es una enfermedad estacional, en la que la transmisión se produce en la época actividad del mosquito, pero no afecta al ser humano

Las medidas de control se basan en la desinsectación del ganado bovino, ovino y caprino y las instalaciones y se establece restricciones sobre su movilidad

El Gobierno regional ha informado al sector ganadero y a la Federación de Caza de la detección en tres ciervos de síntomas compatibles con la Enfermedad Hemorrágica Epizoótica (EHE), en dos cotos de los municipios de Moratalla y Caravaca de la Cruz. Enfermedad que ha sido confirmada por el Laboratorio Nacional de Referencia, por lo que se han declarado sendos focos de la misma. El consejero en funciones de Medio Ambiente, Mar Menor, Universidades e Investigación, Juan María Vázquez, que presidió ambas reuniones, explicó que la EHE se encuentra ya ampliamente distribuida en varias provincias de las comunidades autónomas de Andalucía, Castilla La Mancha, Extremadura, Castilla y León y Madrid.

«Es una enfermedad vírica infecciosa, no contagiosa, transmitida por vectores que afecta a rumiantes domésticos y salvajes. En el ganado vacuno puede producir clínica moderada y autolimitante durante aproximadamente dos semanas. El ganado ovino es susceptible a la infección, pero no presenta, normalmente, síntomas clínicos, y el caprino es muy poco susceptible a la infección», indicó Vázquez.

Es una enfermedad que afecta más a los ciervos, y también se puede encontrar en gamos y corzos, siendo la mortalidad inferior al 10 por ciento. «Se trata de una enfermedad estacional, en la que la transmisión se produce en la época actividad del mosquito, pero no es una zoonosis y, por tanto, no afecta al ser humano. Tampoco tiene repercusión en la actividad cinegética», aseguró Juan María Vázquez.

La enfermedad hemorrágica epizoótica es de declaración obligatoria, por lo que debe comunicarse la sospecha a la autoridad competente, cuando se trate de rumiantes domésticos al Servicio de Sanidad Animal de la Comunidad Autónoma y a los veterinarios de oficinas comarcales, y cuando afecte a rumiantes silvestres a los agentes medio ambientales. En este último caso se pueden dirigir al teléfono del Centro de Coordinación Forestal de El Valle(968.177.500).

La Comunidad trabaja junto a la Federación de Caza de la Región de Murcia, como agentes custodios del terreno, en la difusión del conocimiento que se tiene sobre la enfermedad a los 1.130 titulares de los cotos de caza de la Región de Murcia. El fin es que puedan dar aviso en caso de que aparezcan animales con dicha sintomatología, y con objeto de que los veterinarios del Plan de Vigilancia Epidemiológica puedan tomar las muestras de los animales afectados para monitorizar la evolución de la enfermedad en los ejemplares silvestres.

Por su parte, la Federación regional de Caza colaborará con la Administración regional impulsando mecanismos de información que permitan que los gestores cinegéticos y cazadores faciliten de forma inmediata a las autoridades información sobre animales enfermos, convirtiendo su presencia en el territorio en una herramienta de prevención y control de la enfermedad.

El titular de Medio Ambiente en funciones incidió en que «las medidas de control se basan en la desinsectación del ganado e instalaciones como procedimiento de lucha contra el vector». Respecto a los movimientos nacionales de ganado desde la zona restringida hacia zona libre, los animales y vehículos deben estar desinsectados, con ausencia de sintomatología en el ganado bovino. Además, se establecen restricciones para el intercambio entre países de la Unión Europea de rumiantes domésticos con destino a vida, pero no al traslado a otros estados miembros para su sacrificio.

No se establece ningún tipo de restricción con relación al movimiento o consumo de productos de estos animales (carne, leche, piel, entre otros) ya que la EHE no es una enfermedad que afecte al ser humano.


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