Nueva vacuna contra la tuberculosis bovina: BCG-minus
Los investigadores revelan que han logrado crear una vacuna compatible con la tuberculina sintética que se utiliza en los test cutáneos oficiales para la erradicación de la enfermedad.
La actual vacuna (BCG) que se utiliza en humanos es efectiva también en el ganado, pero interfiere en las pruebas cutáneas de tuberculina. Vacunar a los animales con la vacuna BCG, que contiene una cepa debilitada del patógeno de la tuberculosis (Mycobacterium bovis), provoca resultados positivos en las pruebas de tuberculina, lo que hace imposible diferenciar si el animal está realmente enfermo o está vacunado.
Actualmente, está prohibida la vacunación de ganado bovino contra la TB en la mayoría de los países del mundo.
Durante el estudio, los investigadores buscaron el modo de crear una nueva vacuna BCG que prescindiera de algunas de las proteínas que comparte con el patógeno Mycobacterium bovis, identificando genes que contengan proteínas inmunogénicas codificadas que puedan ser eliminadas sin afectar a la capacidad de la vacuna de actuar como vacuna viva.
Para lograrlo, un conjunto de cepas BCG que habían perdido un gen cada una fueron inyectados a vacas, y se midieron las tasas de supervivencia. Así, el equipo pudo identificar los genes que se podían eliminar sin comprometer la eficacia de la vacuna BCG.
Estos genes que codifican proteínas inmunogénicas fueron borrados del cromosoma del BCG para construir una cepa «BMG-minus».
Las proteínas borradas se usaron para desarrollar un nuevo test cutáneo sintético cuyo resultado será negativo si los animales se vacunaron con la vacuna «BMG-minus».
EFICACIA de la VACUNA
La eficacia de la vacuna fue probada en conejillos de indias. Se comprobó que los conejillos infectados de tuberculosis daban positivo al test estándar de tuberculina, mientras que aquellos conejillos vacunados con la vacuna BMG-minus no.
A diferencia de la prueba cutánea estándar, la nueva prueba también funciona en animales protegidos contra la TB por la vacuna BCG-minus.
Esto permitirá a los ganaderos y veterinarios proteger a los animales con la nueva vacuna, mientras mantienen los test para el diagnóstico de la enfermedad.
Johjoe McFadden, profesor de Genética Molecular de la Universidad de Surrey, dijo:«Para controlar la propagación de la tuberculosis bovina, la vacunación efectiva y el diagnóstico temprano preciso de la enfermedad son claves. Esta nueva vacuna proporciona protección contra la tuberculosis bovina y ayudará en la lucha contra esta enfermedad mortal que infecta a más de 50 millones de bovinos en todo el mundo y es económicamente devastadora para los ganaderos”.
«La próxima etapa de nuestro trabajo será demostrar que tanto la prueba de piel como la vacuna ‘BCG-minus’ funcionan en los rebaños de ganado. Si lo hacen, entonces será posible vacunar al ganado contra la tuberculosis, pero conservando el valor de la prueba de piel para el diagnóstico», señala McFadden.