El pasado sábado 6 de septiembre de 2025, Francia notificó un nuevo foco de dermatosis nodular bovina en el departamento de Ain, afectando a un grupo de cinco animales no vacunados.
Las autoridades confirmaron que todos los animales afectados fueron sacrificados ese mismo día, como parte de las medidas urgentes para contener la propagación.
Este brote representa el segundo detectado en el departamento desde el inicio de la crisis.
Pese a que Francia ha alcanzado una cobertura vacunal superior al 90 % y ha experimentado una disminución notable en el número de brotes semanales, el virus aún no ha sido erradicado.
Por su parte, en un informe actualizado emitido el lunes 8 de septiembre, el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) de España informó de la evolución de la epidemia en Europa. Indica que desde la última comunicación, fechada el 7 de agosto de 2025, Francia ha registrado diez nuevos focos adicionales en su territorio: dos en Saboya, uno más en Ain y siete en Alta Saboya.
En Italia, se han reportado ocho nuevos focos en la isla de Cerdeña, totalizando 55 focos.
Mientras tanto, en la Italia continental, particularmente en Lombardía, la situación permanece estable, sin nuevos casos más allá de uno vinculado a un movimiento epidemiológico desde Cerdeña.
El MAPA subraya que la situación sigue siendo de muy alto riesgo en cuanto a la posible entrada de la enfermedad en España, lo que exige extremar las medidas de bioseguridad en las granjas de ganado bovino, así como en las actividades de transporte y comercio de animales vivos.
En este contexto, el Ministerio continúa monitorizando e investigando los movimientos de ganado desde Francia e Italia hacia España, sin haberse registrado hasta el momento ningún caso positivo en territorio español.
A pesar de los avances vacunales y la reducción de brotes, la reciente detección en el departamento de Ain —junto al incremento de focos en Francia e Italia— confirma que el control de la dermatosis nodular contagiosa sigue siendo un desafío vigente.
La situación demanda máxima vigilancia y cooperación entre países europeos, con especial atención a las fronteras sanitarias y al cumplimiento riguroso de protocolos de seguridad animal. |