Reducción y optimización del uso de antibióticos en vacuno
El 13 de junio de 2018 el Comité Permanente de Representantes de la Unión Europea confirmó el acuerdo para desarrollar una nueva regulación en el ámbito de los medicamentos veterinarios especialmente enfocada en la lucha contra la resistencia a los antibióticos.
Este acuerdo incluye también una clara apuesta por la innovación y por el desarrollo de nuevas terapias antimicrobianas. En concreto, se define en este acuerdo el objetivo de desarrollar un nuevo marco legal para limitar el uso de antibióticos en animales sanos, restringiéndose al máximo su uso como profilácticos y metafilácticos.
También se definirá un listado de antibióticos que pasarán a ser de uso exclusivo en medicina humana, muchos de ellos actualmente de uso frecuente en medicina veterinaria.
Todas estas medidas van acompañadas de un aumento de los niveles de vigilancia y control del uso de antibióticos, los niveles de resistencia y la regulación de las importaciones desde terceros países, los cuales, deberán cumplir también una nueva y más estricta normativa.
Ahora que el acuerdo está confirmado, deberá continuar los trámites ordinarios dentro de la Unión Europea y será aplicable como más tarde en 2022. En resumen, disponemos de, como máximo, 4 años para actualizar nuestro sistema de trabajo y adaptarlo a las nuevas regulaciones.
También debemos tener en cuenta la presión ejercida por los consumidores que cada vez más exigen productos de mayor calidad y comprometidos con el bienestar animal y la salud pública.
El informe europeo que analiza el consumo de antibióticos en animales y humanos (JIACRA) recoge los datos de su uso en veterinaria en nuestro país, así como los niveles de resistencia de bacterias aisladas en mataderos dentro de los programas de monitorización (Figura 1).
Dentro de este informe, se observa que los principales antibióticos utilizados en vacuno son los Betalactámicos (Penicilina, Ampicilina, Amoxicilina…) seguidos por las Tetraciclinas (Doxiciclina, Tetraciclina, Oxitetraciclina…).
Es destacable que, al contrario que en porcino, no se emplean apenas Polimixinas, especialmente Colistina. Este hecho es muy favorable, ya que estos antibióticos son considerados de alta importancia en medicina humana.
Siguiendo las directrices de la Organización Mundial de Sanidad Animal se ha desarrollado una categorización de importancia y uso de antibióticos en veterinaria a nivel nacional.
CATEGORÍA 1
Dentro de la Categoría 1 se encuentran aquellos antibióticos usados de forma habitual en medicina veterinaria como primera elección, pero con recomendaciones de uso.
CATEGORÍA 2