La biomecánica es un área de conocimiento interdisciplinar que estudia los fenómenos naturales que ocurren en los organismos como consecuencia de la aplicación de fuerzas de diverso origen, y sirve para medir el rendimiento en base a la optimización del gasto energético.
Se trata de una disciplina que estudia las estructuras de carácter mecánico y que se apoya en diversas ciencias para analizar el comportamiento de un cuerpo:
- Mecánica
- Ingeniería
- Anatomía
- Fisiología
Muchas lesiones podales tienen un fuerte componente biomecánico.
Por su parte, una definición de los aplomos es la siguiente: relación entre el eje del miembro y sus ángulos respecto del plano medio del cuerpo del animal y la horizontal del suelo.
En este contexto, esto implica equilibrar el balance de pesos a través del recorte de las pezuñas.
La transmisión del peso se logra a través del aparato suspensorio formado por ligamentos y tendones, que reparten el peso y lo transfieren al esqueleto. Además, gracias a las estructuras internas se logra un apoyo importante al sistema circulatorio y a la circulación sanguínea; al andar el animal, la sangre se bombea.
- En el tren anterior se distribuye el 60% del peso de la vaca debido a las estructuras que se encuentran en esta zona (cabeza, pulmones, rumen…), es decir, las pezuñas de las extremidades anteriores soportarán más peso que las posteriores.
- En la región posterior se reparte el 40% del peso restante, localizándose el resto de órganos y estructuras en esta zona (ubre y aparato gastrointestinal básicamente).
Con el recorte funcional trataremos de igualar estos porcentajes de pesos lo máximo posible. Lo ideal es un reparto 50% – 50%.
Lo ideal es repartir el peso en una proporción 50:50, y siempre es mejor dejar las pezuñas un poco largas que recortar de más.
Si realizamos un mal recorte, una parte de la pezuña recibirá más presión y estimulará más el crecimiento de la misma, adoptando esta un mayor tamaño, lo que aumenta el riesgo de aparición de lesiones.
Las articulaciones de las extremidades anteriores y posteriores son estructuralmente diferentes:
- El tren posterior está sustentado por la articulación coxofemoral (cadera y coxis) con su respectivo sistema de músculos y tendones.
- El tren anterior está sustentado únicamente por un sistema de músculos y tendones (y el plexo braquial).
Esta estructura en el tren anterior permite una mayor amortiguación del peso de la vaca, por lo que la pezuña sufrirá menor presión; esto no ocurre en las extremidades posteriores.
Si observamos el movimiento de una vaca a cámara lenta:
- Extremidades anteriores: la zona medial de la pezuña es la que recibe el primer impacto y una mayor presión, seguida de la zona lateral. El talón apoya antes que la punta, aunque a la punta no siempre llega la almohadilla amortiguadora, por lo que esta tiene un riesgo mayor de sufrir lesiones en esta zona.
El impacto en las extremidades anteriores es menos estresante que en las posteriores debido a la estructura de la articulación, como hemos comentado.
- Extremidades posteriores: el primer impacto se produce en la zona lateral de la pezuña, lo que provoca un estrés extra y supondrá más problemas de cojeras.
El recorte funcional se define como una técnica utilizada para eliminar los excesos de la capa córnea para así restablecer la función normal de la pezuñas, equilibrando las presiones entre ellas y sus diferentes zonas. Es una técnica sencilla, pero extenuante y con riesgos.
Es importante tener claro cómo camina la vaca. El aterrizaje se produce con el talón y el despegue se inicia con las puntas, por lo que la punta de la pezuña tiene el riesgo de lesionar al despegar, básicamente debido a la ausencia de almohadilla. Todo esto aumenta el riesgo de lesiones y cojeras.