Ganaderos de Europa y Sudamérica, cerca de un acuerdo que distan mucho los beneficios de ambos
Una iniciativa local busca que el paisaje sea declarado Patrimonio Mundial de la Unesco. Unas 250 vacas nodrizas y terneros de su rebaño pastan durante unos ocho meses al año en pequeños prados limitados por sotos, entre colinas verdes.
El ganadero de 53 años actualmente dirige la explotación de su abuelo y su padre, la cual abarca 145 hectáreas divididas en varias parcelas. Sin embargo, tiene miedo de que esto desaparezca con la llegada de carne «masiva» de granjas de Sudamérica que pueden criar entre «5.000 y 10.000» reses.
Francia, el primer productor europeo de carne bovina, teme la posibilidad de «competencia desleal» desde los países del Mercosur, como Argentina, Brasil, Uruguay y Paraguay, si la UE concluye un acuerdo comercial con dichos países.
«Traer carne de otros lugares que no cumplen las mismas normas [de producción], cuando ya estamos luchando por tener ingresos» pese a contar «con el apoyo» de las ayudas europeas es «hipócrita», denuncia el también miembro del sindicato Federación Nacional Bovina (FNB).
Francia experimenta una presión sobre su ganadería
En junio, la FNB y la patronal Interbev instaron al presidente francés, Emmanuel Macron, a mantenerse «firme» en su oposición al acuerdo, el cual podría tener repercusiones en una cumbre de líderes europeos y latinoamericanos en Bruselas la esta semana.
Mercosur
Al ser MERCOSUR un bloque relativamente cerrado, la apertura concedida a la UE no tiene precedentes y va a generar grandes beneficios. La Comisión Europea estima que, gracias al desmantelamiento acordado, las exportaciones europeas se beneficiarán de un ahorro arancelario de 4.000 millones de euros anuales, lo que representa cuatro veces el ahorro arancelario que ofrece el acuerdo con Japón. El Acuerdo permitirá eliminar numerosas barreras arancelarias y no arancelarias. MERCOSUR liberalizará el 91% de sus importaciones (91% de líneas arancelarias) y la UE liberalizará el 92% de sus importaciones (95% de líneas arancelarias).
El acuerdo supone la