El presidente de la cooperativa Dehesa Grande asegura que los consumidores se están haciendo cada vez «más conscientes de que tienen que comprar carne nacional, de la tierra»
El presidente de la asociación, Gabriel Gonzalo, preside la cooperativa desde 2014. Son la cooperativa salmantina referente en el sector de vacuno de carne, y desde el año 2000 aglutinan, a través de sus más de 600 socios, 40.000 vacas nodrizas. La mayor parte de la cabaña reproductora son F2 descendiente de la raza autóctona.
Los socios de Dehesa Grande pertenecen a cinco cooperativas de primer grado de la provincia de Salamanca:
- Consorcio de Promoción del Ovino
- Fuentevacuna S. Coop.
- Ganavaex S. Coop.
- Campo Vacuno
- Carne Natural de Ledesma
Su principal cometido es la producción, industria cárnica y comercialización de vacuno de carne, así como la prestación de numerosos servicios a nuestros socios.
Si hablamos de producción en 2022, la cifra ascendió a 45.00 animales, siendo la facturación global de la cooperativa de 54 millones de euros, entre la producción, comercialización y prestación de servicios de sacrificio y sala de despiece de su industria cárnica.
En este sentido, en 2022 se comercializaron aproximadamente 10.000 terneros de vida a través de su centro de concentración, desde donde los distribuyen a nivel nacional.
Momento que vive el vacuno
En cuanto a los gustos del consumidor sí hemos apreciado un cambio de gusto y hábitos de consumo y compra de proveedores y cliente final. Esta evolución es positiva. Ahora hay una mayor demanda de carne madurada. El cliente comprende que la carne no es un producto de 24 horas. Por eso, percibimos que el canal HORECA comercializa mucha más carne de este estilo cuyo precio se ha incrementado debido al cambio de consumo.
La fórmula para llevar hasta el consumidor una carne de calidad a un precio competitivo para Gonzalo es muy transparente: «Nuestro origen, el máximo control de trazabilidad, el bienestar animal, la alimentación natural. Además, nuestro ciclo cerrado de producción aporta mayor confianza en todo nuestro proceso hasta que llega a los presciptores finales como carniceros, clientes, etc. Para ello la cooperativa es una gran herramienta.»
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Trabajar amparados por una IGP u otras figuras de calidad
Según explica G. Gonzalo, trabajar por una IGP u otras figuras es una herramienta comercial que pone la administración basada en genética, origen y, sin duda, creen que es positivo cuidarlas y mantenerlas, porque les da una aproximación de lo que cada uno produce en una comarca, provincia o región. Cada sello IGP está marcado por genética u origen y, por supuesto, su rentabilidad depende de cada figura de calidad.
«En cuanto a si garantiza la fidelidad del consumidor, creemos que hay una venta local del producto muy fidelizado por su origen, genética o apego personal.»
«Y respecto a si las exigencias de su reglamento de uso limitan la labor de los profesionales, somos de los que piensan que este tipo de reglamentos, a veces, no empatizan con la labor comercial del día a día, y por eso deberían ser más flexibles, lo que ayudaría a la comercialización.»
¿La fórmula para sobrevivir pasa por integrarse en una cooperativa?
«Es una herramienta del mercado para sobrevivir. Creemos que esta fórmula le permite al socio ganadero dedicarse con más detalle y esmero a su producción, dejando a nuestra cooperativa comercializar su producción. Un modelo que asegura su cobro, hoy en día tan importante en el sector primario.»
En cuanto a si apostan por la integración ganadera, evidentemente no hay mayor integración que una cooperativa, además, cuentan con granjas y estan comenzando con la contratación de servicios de engorde a modo de integración.
Además, las últimas tendencias de consumo también están apostando por potenciar el llamado “Producto Km 0”. Muchas son sus ventajas: son sostenibles porque se reduce la contaminación, se respeta el medio ambiente y favorecen la economía local, entre otras virtudes. En definitiva, son consumidores que tienen en cuenta aspectos éticos y ecológicos en sus decisiones de consumo.
Por eso, desde Dehesa Grande se han adaptado a todos estos nuevos hábitos de consumo. En concreto se han potenciado la oferta de productos en su tienda online, optimizando al máximo los tiempos en los pedidos. Esta plataforma de compra también está destinada a grandes compras para los profesionales del canal HORECA, por ejemplo.
Asimismo, y de manera presencial, tienen carnicerías franquiciadas en varias ciudades de España que cuentan con todos sus productos y finalmente, su carne también se puede encontrar en algunas grandes superficies.