La agalaxia contagiosa es una enfermedad cuyo agente causal son algunas especies de micoplasmas que afectan fundamentalmente al ganado caprino y ovino, pudiendo ocasionar pérdidas productivas y económicas como consecuencia de los cuadros de mastitis, artritis y queratoconjuntivitis.
Existen cuatro especies de micoplasmas que pueden afectar a los pequeños rumiantes:
- Mycoplasma agalactiae
- Mycoplasma mycoides subsp capri
- Mycoplasma capricolum subsp capricolum
- Mycoplasma putrefaciens (Corrales et al., 2007)
Estas dos últimas aparecen de manera más esporádica, siendo las dos primeras las de mayor importancia en España.
En el ganado ovino, Mycoplasma agalactiae suele ser el agente causal; en el caprino, varias especies pueden estar presentes en un mismo rebaño o individuo, ocasionando infecciones mixtas.
EPIDEMIOLOGÍA
Se trata de una enfermedad endémica de la cuenca mediterránea de declaración obligatoria (EDO).
- Colectivos más vulnerables: individuos jóvenes y hembras en lactación.
- Vías de transmisión: contacto directo, lactancia y ordeño; calostro.
Otras vías de excreción son las secreciones oculares, fecales y genitourinarias.
La pasteurización reduce significativamente la concentración de Mycoplasma agalactiae en el calostro caprino.
Por otro lado, M. agalactiae y M. Mycoides subsp capri se excretan a través del semen de los machos, interfiriendo en la calidad espermática (Gómez-Martín et al., 2021a). Esto, unido a la capacidad de los micoplasmas para sobrevivir en el aparato reproductivo de los pequeños rumiantes hacen necesario considerar el riesgo de transmisión venérea.
En los rebaños, la principal vía de transmisión es la introducción de animales infectados.
DIAGNÓSTICO
Existen varios métodos para el diagnóstico de la agalaxia contagiosa:Directo: evidencian la presencia del patógeno. Indirecto: se basan en la detección de la respuesta del hospedador ante el patógeno. El diagnóstico de la especie es importante para establecer el curso de la infección y un tratamiento adecuado. Se ha observado que los antibióticos más eficaces contra M. mycoides subsp capri son las fluoroquinolonas, tetraciclinas y los macrólidos (tilosina y eritromicina) (Antunes et al., 2007). En cuanto a Mycoplasma agalactiae, destaca la eficacia de las fluoroquinolonas, tetraciclinas y macrólidos. En los estudios realizados in vitro, la eritromicina presenta una elevada concentración mínima inhibitoria en cepas de M. agalactiae de muestras de tanque, semen u oído de rebaños con y sin sintomatología clínica de la enfermedad (Amores et al., 2012b). Finalmente, es importante también detectar los animales asintomáticos. Para ello, se deben realizar hisopados del conducto auditivo externo, debido al elevado número de infecciones auriculares. PROGRAMA NACIONAL DE VIGILANCIA, CONTROL Y ERRADICACIÓN El objetivo principal del Programa Nacional de la enfermedad es establecer un programa sanitario voluntario de vigilancia y control de la enfermedad, unas cualificaciones sanitarias y la implantación de medidas de manejo e higiene complementarias. No se contemplan sacrificios obligatorios de animales. El programa está dirigido principalmente a explotaciones...
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