SAT Casa Menor - El factor humano & el nivel genético van de la mano

SAT Casa Menor – El factor humano & el nivel genético van de la mano

Por aquel entonces, tenía poco conocimiento del sector así que decidió formarse y rodearse de expertos en vacuno para ser capaz de dirigir en un futuro la explotación familiar.

El primer gran cambio fue en 1988 cuando SAT Casa Menor empezó a colaborar con Leche Pascual. Un paso muy importante en las aspiraciones futuras de estas instalaciones.

Lo primero que hace Javier cuando llega a la granja es dar de comer a terneras y terneros, limpiar su zona de descanso y las camas de las vacas de leche. Más tarde, a las 9, llega otra persona que se encarga de limpiar todos los comederos y de dar la comida a las novillas y las vacas secas.

Javier prepara y reparte la comida para las vacas de leche. Se ordeña a las 06:40 de la mañana y a las 18:40 de la tarde, tarea que siempre lleva a cabo la misma persona encargada excepto los días libres y vacaciones, que es el mismo Javier quien desempeña dicha tarea.

En cuanto a las novillas y las vacas secas también se van al prado de 10.30 mañana a las 17.30 de la tarde.

Usted, para el ciclo reproductivo, usa un semen para las novillas y otro para las vacas ¿Cuál es el motivo de este procedimiento?

En SAT Casa Menor usamos varios tipos de semen dependiendo de si es para las novillas o para las vacas. Normalmente, el semen que usamos para las novillas es siempre sexado. Solo usamos semen de carne cuando hemos realizado un par de inseminaciones y no han dado resultado.

En el caso de las vacas, el ciclo reproductivo que utilizamos es de un 80% semen de carne, un 15% semen convencional y 5% semen sexado.

Nosotros operamos con esta filosofía porque resulta más económico y rentable dado que nos aseguramos la recría que necesitamos. Buscamos la calidad y no la cantidad.

Se trata de una explotación sin voluntad de crecimiento que lleva 15 años con el mismo censo de animales por lo que, de este modo, tenemos el censo acotado, conocemos los datos necesarios de muchos años de reposición y determinamos la que necesitamos.

A partir de estos resultados, ajustamos la recría para obtener los animales que nosotros queremos, es decir los mejores, lo que ha llevado a convertir esta explotación en la mejor de España en su tamaño por ICO, que ahora mismo es de 2.719.

«El ciclo reproductivo que utilizamos es de un 80% semen de carne, un 15% semen convencional y 5% semen sexado». – Javier Vázquez ¿De qué modo realiza la sincronización del celo? Debido a que se trata de una explotación pequeña, nosotros no realizamos este tipo de sincronización. Normalmente, cuando procedemos a la primera inseminación lo hacemos en un período de entre 75 y 90 días. Los 90 días son para las vacas de mayor producción. Aunque en nuestra explotación no usemos la sincronización del celo, el hecho de que las vacas estén tanto tiempo en el prado nos permite observarlas a diario y detectar de forma visual el celo del animal. Se podría decir que hablamos en cierto modo su lenguaje. A nivel de recría y auto reposición, ¿cuál es su política de actuación y cómo la gestionan? Ahora mismo, en esta explotación, hemos tenido una tasa de eliminación del 19% en los últimos 12 meses y una previsión de partos del 22% en cuanto a novillas con un margen del 3% de reposición. Usted ha comentado que se trata de una explotación de vacuno, aun así, hace uso de dos tipos de semen con producción de...

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