Se trata de una estrategia cuya finalidad es reducir el uso de antibióticos, entre otros, como evitar la pérdida de biodiversidad en Europa y en el mundo.
Estos planes dan prioridad a los ciudadanos en su compromiso de aumentar la protección del suelo y el mar, regenerar los ecosistemas y tratar de que la UE lidere la escena internacional.
Esta estrategia, «De la granja a la mesa» facilitará la transición hacia un sistema alimentario sostenible en Europa, con seguridad alimentaria y garantizando el acceso a dietas sanas con un origen en un planeta sano.
Así, se reducirá la huella ambiental y climática del sistema alimentario y se reforzará su resiliencia, protegiendo la salud de las personas y garantizando los medios de subsistencia.
Esta estrategia establece objetivos concretos, por ejemplo, reducir un 50% el uso de plaguicidas, reducir un 20% como mínimo el uso de fertilizantes, reducir un 50% las ventas de antibióticos en ganadería y acuicultura y alcanzar un 25% de tierras agrícolas dedicadas a la agricultura ecológica.
Fuente: oviespaña.com