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Coag Murcia está en alerta por la enfermedad que ataca al ganado, pero insiste en que no afecta a los humanos
La probabilidad de muertes entre los ciervos y los gamos es alta, aunque tiene escaso impacto entre las cabras y las ovejas, asegura la organización
Ante la propagación descontrolada de los focos de la Enfermedad Hemorrágica Epizoótica en explotaciones de vacunas en la mitad sur de España -menos en las provincias de Valencia y Alicante– la Organización de Agricultores y Ganadores (Coag) de la Región de Murcia, aseguró este martes que están en alerta para intentar minimizar el contagio a los animales, aunque insistió en que no afecta a los humanos. Así lo señaló su coordinadora veterinaria, Teresa López, quien precisó que le preocupa también que haya una alteración en la fauna salvaje. Para contrarrestar el avance, Coag apuesta por incrementar las medidas de desinfección en las granjas y los camiones que transportan el ganado para evitar a toda costa la presencia de mosquitos. También, aconseja que los animales que permanezcan en las granjas en las horas en que los mosquitos están más activos; más concretamente, por la mañana y la tarde. La semana pasada, se detectaron los tres primeros casos en tres ciervos de dos cotos de Moratalla y Caravaca de la Cruz.
La probabilidad de muertes entre los ciervos y los gamos es alta
En estos momentos, asegura López, los animales vivos no pueden desplazarse dentro de la Unión Europea porque «estamos en zona de estrés hemorrágico», pero está permitido a tercero países. Por ejemplo, detalla que Arabia Saudí ya estaba pidiendo que se haga una analítica previa a los animales para confirmar que no presentan síntomas de la enfermedad, aunque Marruecos, en cambio, no lo exige. «Habrá que ver cada país qué exigencias tiene y hacer la analítica», indica la también presidenta del Ilustre Colegio de Veterinarios de la Región, quien recalca la rapidez con la que se ha propagado desde julio: «Apareció a finales de julio en Andalucía, donde los controles de los mosquitos es muy complicado y ya lo tiene casi toda España».
«Parece que las cabras no tienen sintomatología, la oveja algo, mientras que las vacas son las más problemáticas», destaca López, quien remarca que «se parece mucho a la enfermedad de la lengua azul, que ya se tuvo en España, aunque se notificó ningún caso en la Región, lo que no quiere decir que no se pueda dar».
Protocolo
La organización que agrupa a ganaderos conmina a realizar una analítica ante una sospecha o incluso ante el descubrimiento de algún cadáver. «Por ser nueva, hay que controlarla, que no se extienda, aunque es una enfermedad que está corriendo muy rápido», precisó López, quien hace hincapié en que no es perjudicial para las personas: «No se transmite por leche, ni por carne, por ningún producto de origen animal, que venga de rumiante».
