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AUTOR

Maite Lasarte Elizalde

Secretaria Ejecutiva de ASLANA

La raza Latxa es una de las razas ovinas más primitivas que se conservan en la Península Ibérica. Su nombre proviene de la palabra en euskera “latza”, que significa “basta”, haciendo referencia al tipo de lana que la caracteriza: gruesa y burda.

Se trata de una raza autóctona de aptitud lechera muy rústica y muy bien adaptada a las difíciles condiciones ambientales del medio natural donde se ubica, que se caracteriza por una orografía montañosa y la abundancia de lluvias.

Se localiza principalmente en la Comunidad Autónoma Vasca (CAV) y en el norte de la Comunidad Foral de Navarra, existiendo también ejemplares en Cantabria y Asturias.

En el Catálogo Oficial de razas de ganado de España, la raza Latxa está clasificada como Raza Autóctona de Fomento.

CENSOS

A continuación, se muestra la evolución en el número de hembras >1 año de la raza desde el año 2002, en la CAV y Navarra (Gráfica 1):

Se constata un descenso acusado y continuado en el censo de animales, disminuyendo en un 42% entre el año 2002 y 2019.

La disminución del número de rebaños es mucho menor, de un 7%, pasando de 9.183 a 8.567 cabezas.

Esto se debe principalmente a un aspecto singular de la raza Latxa: siendo una raza de aptitud lechera, hoy en día, en torno al 45% de las ovejas no se ordeñan y pertenecen a caseríos cuya principal actividad no es la ganadería, y conservan un pequeño rebaño de ovejas por su fuerte arraigo a la raza.

Esta situación se da principalmente en zonas con fuerte implantación de la industria y en ellas, la raza Latxa ejerce una importante labor de mantenimiento de los prados colindantes al caserío y del paisaje típico de estas zonas.

PROTOTIPO RACIAL

La raza Latxa tiene tres variedades genéticamente diferenciadas:

  • Latxa Cara Rubia
  • Latxa Cara Negra de la CAV
  • Latxa Cara Negra Navarra, con características funcionales y morfológicas similares, a excepción del color de la piel, el pelo de cabeza y extremidades y la cornamenta.

El prototipo racial se detalla a continuación:

En la variedad Latxa Cara Negra Navarra, todos los animales presentan cuernos, no así en Cara Negra de la CAV ni en la Cara Rubia, cuyas hembras carecen de ellos o si los poseen son débiles. Los machos los presentan con más frecuencia, siendo estos de gran desarrollo, sección triangular y enrollados.

En la variedad Cara Rubia, la piel, mucosas y faneros serán despigmentados. En las variedades de Cara Negra la piel es blanca salvo en la cabeza y extremidades, donde es oscura, así como el pelo.

MANEJO

Esta raza ovina rústica ha perdurado a lo largo de los años a través de prácticas de manejo íntimamente ligadas al medio natural y, si bien se han producido algunas variaciones, éste sigue siendo el eje del manejo de los rebaños.

Los ganaderos son normalmente los propietarios del rebaño y la mano de obra es principalmente familiar.

En los rebaños en ordeño, uno de los aspectos que ha experimentado una notable transformación han sido las instalaciones, que se han ido adaptando o sustituyendo por nuevas naves para mejorar el manejo del rebaño y las condiciones de trabajo del ganadero: pasillos y cintas de alimentación, emparrillados, sala de ordeño, etc.

Así, en la mayor parte de las explotaciones, el ordeño se realiza de manera mecánica, e incluso en algunas chabolas de montaña.

Lo mismo ha ocurrido con las instalaciones destinadas a la elaboración de queso, que se han ido adecuando a las exigencias higiénicosanitarias actuales.

El sistema de producción se caracteriza por ser de un parto al año, maximizando el aprovechamiento de recursos del entorno, pastos comunales y puertos de montaña.

El manejo más extendido a día de hoy se basa en que la paridera, el amamantamiento de los corderos y el inicio del ordeño coincidan con la estabulación de los rebaños en invierno.

En este periodo la alimentación es suministrada en pesebre, y se basa en forrajes propios (heno o ensilado de pradera) y/o forrajes adquiridos (principalmente alfalfa henificada o deshidratada), junto con un suplemento de piensos concentrados.

  • La mayoría de los partos son simples, siendo la prolificidad media de cubriciones por monta natural de 1,2 corderos/parto (Fuente: ASLANA).
  • La duración de la lactancia de los corderos es de 20-25 días, siendo sacrificados como lechales con 10-12 kg PV, pasando entonces las ovejas a ordeño.
  • En muy pocos rebaños se realiza lactancia artificial de corderos.
  • Las corderas y corderos de reposición se destetan a la edad de 45-60 días con un peso de 16-19 kg, momento en el que las madres pasan a ordeño con el resto del rebaño.

A partir de inicios de marzo o abril, dependiendo de la zona y del rebrote de las praderas, las ovejas salen a pastorear las praderas próximas a la explotación. Durante la primavera, las ovejas en ordeño simultanean el pastoreo en la superficie de la explotación con diferentes niveles de suplementación en pesebre, dependiendo de la oferta forrajera de las praderas y de las condiciones ambientales.

En los meses de mayo–junio muchos rebaños suben a pastos comunales y comienzan las labores de recolección y conservación de forraje para la alimentación invernal del ganado.

En verano-otoño, se realiza un aprovechamiento de los pastos de altura en montes comunales, a unos 800-1.000 msnm, y el fin del ordeño de los rebaños se suele producir entre los meses de junio y agosto.

Este manejo en algunos casos ha ido evolucionado hacia el mantenimiento de las ovejas en lactación durante más tiempo en las praderas de fondo de valle, facilitándose así el ordeño.

Así, los datos de gestión técnico-económica de INTIA en 2019, basados en 25 rebaños de raza Latxa en ordeño en Navarra, indican que, con una media de 373 ovejas, la S.A.U. (Superficie Agraria Útil) es de 27,57 hectáreas, sin contar el uso de los montes comunales. El consumo medio de pienso es de 165 kg/oveja.

Respecto a la productividad lechera, el Control Lechero Oficial llevado a cabo en 175 rebaños en el año 2019, revela que la Lactación Real (leche producida desde el parto hasta el secado) es de 245 litros producidos en 176 días de duración de la lactación (Fuente: CONFELAC).

PROGRAMA DE MEJORA GENÉTICA

El Libro Genealógico y el Programa de Mejora Genética está gestionado por CONFELAC a través de las asociaciones territoriales que la componen: ACOL en Bizkaia, AGORALA en Araba, ELE en Gipuzkoa y ASLANA en Navarra.

En 2019 en el Libro Genealógico de la raza Latxa había registrados 215 rebaños con 76.925 ovejas inscritas; el 39% de los rebaños y el 47% de las ovejas están en Navarra.

El Programa de Mejora Genética tiene como objetivo incrementar la eficacia productiva de la raza, manteniendo su rusticidad, adaptación al medio y el característico sistema de producción, mejorando así la rentabilidad económica de las ganaderías.

Es un programa basado en la selección en raza pura y, desde sus inicios en los años 80 hasta el año 2000, el carácter de mejora fue la cantidad de leche y el criterio de selección, la Lactación Tipo a 120 días, es decir, la estimación de la leche producida desde el parto hasta el día 120 de lactación.

Desde el año 2000, también se trabaja en la mejora de la morfología mamaria y de la composición química de la leche, siendo los criterios de selección el % y los kg de grasa y proteína de la leche.

Tras 30 años de trabajo continuo, profesional y con un fuerte vínculo entre todos los agentes implicados (ganaderos, asociaciones de ganaderos y centros de asesoramiento, de inseminación y de investigación), el Programa de Mejora Genética de la raza Latxa es un caso de éxito, tal y como se muestra en la Gráfica 2:

PRODUCTOS

La raza Latxa, por su característico sistema de producción, proporciona una leche única y de gran calidad; además, en la elaboración del queso se emplea leche cruda, lo cual permite trasladar estas peculiaridades hasta el paladar del consumidor.





 
 

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Revista rumiNews Septiembre 2024

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