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Satisfacer las necesidades naturales y fisiológicas de los animales repercute positivamente en su capacidad de recuperación
Este es el resultado de un estudio por el que Ingrid van Dixhoorn obtuvo su doctorado en la Universidad e Investigación de Wageningen. Además, se puede predecir el grado de resiliencia que muestran los animales ante las perturbaciones.
Van Dixhoorn estudió el periodo de transición que experimentan las vacas desde el periodo seco (el ganadero deja de ordeñarlas para que las ubres puedan recuperarse) hasta la lactación (producción de leche, que comienza cuando nace el ternero). Durante las dos primeras semanas de este periodo, las vacas son muy vulnerables. Van Dixhoorn afirma que «mantener un ritmo diurno y nocturno adecuado aumenta la resistencia de las vacas». Además, «necesitan abundante comida para superar este periodo».
Enriquecimiento extremo
Van Dixhoorn estudió cómo responden los cerdos a las infecciones pulmonares. Proporcionó un nivel extremo de enriquecimiento en parte del establo. Se añadieron todo tipo de materiales para que los cerdos pudieran expresar su comportamiento natural, como masticar y hozar. Van Dixhoorn: «Los cerdos del establo enriquecido se beneficiaron visiblemente del enriquecimiento y demostraron ser más resistentes porque se recuperaron más rápido y se vieron menos afectados por la enfermedad».
Las enfermedades y otras perturbaciones se deben a diversos factores y nunca pueden prevenirse por completo. Por eso, «es importante que los animales sean resistentes, para que puedan recuperarse más fácilmente». Enriquecer el entorno vital de los cerdos y fomentar un ritmo diurno y nocturno adecuado en las vacas son dos ejemplos de estrategias que los ganaderos pueden desplegar para mejorar la resiliencia de su ganado y repercutir positivamente en su salud.
Factores predictivos
Además de influir en la resiliencia, la tesis de Van Dixhoorn también muestra que es posible identificar factores predictivos de la misma. «Se puede determinar la sensibilidad de un animal antes de que surja un problema», afirma Van Dixhoorn. La resiliencia en los animales se describe mejor como la capacidad de superar enfermedades y otras perturbaciones y la velocidad de recuperación.
Este estudio es un excelente ejemplo de cómo la Universidad e Investigación de Wageningen trabaja en pro de la salud y el bienestar de los animales, reforzando sus capacidades naturales y contribuyendo así a su salud y a una ganadería más humana.
Se puede determinar la sensibilidad de un animal antes de que surja un problema
Fuente:
Wageningen University & Research
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