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29 Mar 2023

Uso de juegos para el reconocimiento de cojeras en ovino

Exploración del potencial del uso de juegos de simulación para implicar a los ganaderos de ovino en el reconocimiento de cojeras


  • Los juegos de simulación por ordenador se utilizan cada vez más en la agricultura como una herramienta prometedora para estudiar, apoyar e influir en las prácticas ganaderas de la vida real.
  • Han estudiado el potencial de los juegos de simulación para motivar a los ganaderos de ovino en el reto de reducir la cojera.

En colaboración con las partes interesadas del Reino Unido, desarrollaron un juego en el que se reta a los jugadores a identificar a todas las ovejas cojas de un rebaño simulado. Después evaluaron el potencial del juego como herramienta para ayudar a evaluar, formar y comprender la capacidad de los ganaderos para reconocer los primeros signos de cojera.

Se invitó a participantes del Reino Unido a participar en el juego on-line, compartiendo con los científicos sus puntuaciones en el juego, junto con información relativa a su experiencia en la ganadería en la vida real, cómo jugaron y sus comentarios sobre el juego.

 

Se utilizaron métodos mixtos para analizar esta información y evaluar el juego. Los análisis cuantitativos consistieron en una modelización lineal para comprobar las relaciones estadísticas entre el recuerdo de los participantes en el juego (% del número total de ovejas cojas marcadas como cojas) y la información adicional que proporcionaron.

El análisis cualitativo de los comentarios de los participantes sobre el juego consistió en un análisis temático y un cuestionario de escala Likert, para contextualizar los resultados cuantitativos e identificar ideas adicionales del estudio.

Participantes en el estudio

Un total de 63 personas participaron en el estudio, tras la eliminación de un participante que dijo que el juego no le funcionaba correctamente. Treinta y dos participantes no habían trabajado en la ganadería o en un campo relacionado, y 31 habían trabajado en la ganadería o en un campo relacionado. La mayoría (30/31) habían trabajado con ovejas como agricultores (12/31), ganaderos (8/31), veterinarios (9/31) o en otras funciones (9/31), como técnicos ganaderos o en investigación o política agraria (a veces algunos participantes tenían experiencia en varios campos, de ahí que las cifras no sumen 31).

La mayoría de los que compartieron información sobre los niveles de cojera que habían experimentado en los rebaños con los que habían trabajado dijeron que habían experimentado niveles anuales de cojera de entre el 5 y el 10% (13/29).

Puntuaciones de recuerdo de los participantes en el juego

Las puntuaciones de precisión y recuerdo de los participantes se distribuyeron como se esperaba, lo que permitió un análisis más profundo de las puntuaciones de recuerdo de los participantes. La mayoría de los participantes (89%) obtuvieron puntuaciones de precisión superiores al 50% (prueba de D’Agostino; sesgo = -1,53, curtosis = -4,24, p = < 0,01), lo que indica que no estaban simplemente «haciendo trampas» en el juego mediante la estrategia de marcar todas o la mayoría de las ovejas como cojas para maximizar sus puntuaciones de recuerdo.

Las altas puntuaciones globales de precisión también indicaban que las animaciones de cojera eran al menos lo suficientemente realistas como para que los participantes las reconocieran como cojeras, indicando además que la variación en las puntuaciones de recuerdo probablemente reflejaba cierto nivel de habilidad para detectar la cojera. Las puntuaciones de recuerdo se distribuyeron normalmente en todo el rango de porcentajes, lo que justifica un análisis paramétrico de los factores que influyen en las puntuaciones de los participantes.

Los juegos de simulación tienen potencial como herramienta para la educación y la investigación en ganadería, pero alcanzar los niveles deseados de realismo y/o atracción puede ser un obstáculo para hacerlo realidad. La investigación futura debería explorar más a fondo este potencial, con la ayuda de presupuestos más amplios y una colaboración más estrecha con agricultores, ganaderos y veterinarios.

El estudio de evaluación on-line puso de manifiesto los retos y las oportunidades que plantea el uso de juegos de simulación como apoyo a las prácticas ganaderas en la vida real. Aunque los comentarios positivos de los participantes indicaban indicios de potencial para el uso de videojuegos de simulación en este contexto, los obstáculos a la participación de los usuarios de este público en juegos de ordenador como el nuestro impidieron que este potencial se manifestara de forma más generalizada.

Entre los obstáculos concretos cabe citar el aparente deseo de los participantes de alcanzar altos niveles de realismo e implicación en el juego, expectativas que les costó cumplir y que, por tanto, limitaron la capacidad del juego para funcionar como herramienta de evaluación cuantitativa, formación y comprensión de la capacidad de los ganaderos para reconocer los signos más tempranos y sutiles de cojera. No obstante, los resultados del estudio aportan valiosas ideas para el diseño y el uso de futuros juegos y estudios similares en ganadería.

 




 
 

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